Buscar este blog

Poesía

Y qué es la poesía sino una forma sana de locura...
Poeta que no esté loco...no es poeta

El Parto poético

La poesía es un continuo parto, con todo y dolores
pero no se paren niños, se paren versos

miércoles, 20 de octubre de 2010

Carta sin destino a un poeta novato (en prosa)



 A quién pueda interesar:

Joven poeta, te escribo sin saber si algún día leerás esta misiva, y te escribo porque no quiero que pierdas tu precioso tiempo como lo perdí yo; navegando en mares tempestuosos envuelto por la más oscura de las tinieblas, la ignorancia.
Si tienes la vena poética; que no es otra cosa que vocación hacia la poesía, ya eres poeta aunque no hayas juntado aún dos palabras en un verso; lo eres, al menos en potencia.
Si además de eso tienes esa pasión que obsesiona al punto de quitarte el hambre y el sueño; entonces no tienes más remedio que rendirte a tu destino; por tanto no hagas caso de tus padres que te impelen a abandonar tu sueño bajo la excusa de que los poetas nos morimos de hambre; porque es mejor morirse de hambre que morir de depresión y la depresión te acorralará sin piedad ninguna si no sigues tu corazón, por la sencilla razón de que jamás nunca te sentirás realizado; no importa qué tan bien hagas ese otro trabajo en que te desempeñas; no importa qué tanta pericia hayas desarrollado en esa otra profesión que ejecutas tan solo para complacer a quienes amas.

Y es que estás marcado, condenado a cumplir con el propósito para el cual naciste o a hundirte en la más profunda depresión si esquivas dicho propósito.
Entonces, para que puedas pulir esa vena y excavar de ella las joyas literarias que tiene enterradas; permíteme darte unos consejos:

En primer lugar has de saber que el “genio es el resultado de un diez por ciento de inspiración y un noventa por ciento de transpiración” como bien dijo Albert Einstein;
esto significa que para expresar tu mundo interior requieres de esfuerzo, mucho esfuerzo, a veces demasiado esfuerzo… la buena noticia es que si tienes esa vocación y esa pasión de la que hablábamos más arriba, todo ese esfuerzo en lugar de cansarte te llenará de energías, en lugar de aburrirte te motivará más y más.

La poesía es un arte y como todo arte requiere que desarrolles pericia.
Y la pericia es esa frontera donde confluyen la práctica y el conocimiento.

Para hacerte con la práctica todo lo que tienes que hacer es escribir, escribir mucho, escribir todo lo que te pase por la mente; desde “Mi mamá me mima” hasta “deambulando por orbes extenuados y asediados por históricas pretensiones; atosigado por los báculos de tiempos ancestrales entre etruscos y sabinos”  o lo que sea que se te ocurra; y por favor, por lo que más quieras, atesora todo lo que escribas…no botes nada, aunque te parezca ridículo, inútil, tonto o lo que sea, no botes nada… para releerlo constantemente; porque mientras más te lees mejor te conoces, y mientras mejor te conozcas más auténtico y original serás. Además releyéndote constantemente tendrás la mejor medida de tus progresos; qué tan bien lo has hecho, cuánto te has desarrollado y qué te falta por pulir y aprender. Como dicen los profesionales de la Programación Neuro-Lingüística: “Para llegar a donde quieres ir tienes que saber primero dónde estás parado” y no hay mejor manera de averiguar eso que leyéndote a ti mismo en el tiempo.
No cometas el error que cometí yo tantas veces; de botar todos mis cuadernos cada tantos años; porque cuando los necesites –y ten por seguro que los vas a necesitar- ya no estarán; recuerda esta sentencia: La peor enfermedad de un escritor es dudar de su trabajo…confía en ti y en tu obra, aunque los críticos quieran hacerte pedazos, también despedazaron a Lope de Vega, a Quevedo y a Garcilazo en sus respectivos tiempos; pero, por otro lado tampoco es bueno que hagas oídos sordos a la crítica verdadera, la que construye y edifica.

Para obtener el conocimiento es necesario que leas; como dicen todos los poetas, tienes que leer a los poetas que te precedieron, pero mi experiencia me ha demostrado que eso no basta; no… si buscas la excelencia.
Y es que una casa sin buenos cimientos no se sostiene mucho tiempo, y mientras más alto sea el edificio literario que quieras construir, más hondos han de ser sus cimientos.
Es menester que aprendas teoría poética, las poéticas de Aristóteles, Platón, Horacio, Muratori, Luzán son las bases de las poéticas que les siguen; luego de leer estos trabajos básicos puedes abordar y disfrutar de las poéticas más recientes del siglo XX.
No hagas caso de los que te dicen que el pasado ya pasó y que ya no importa, ya te lo dije, si los cimientos no son profundos el edificio se cae…

Y tienes que aprender Métrica Castellana (eso si piensas escribir en Castellano; si tu intención es escribir en otro idioma, hazte con un tratado de métrica para ese idioma, porque aunque puedan parecerse; nunca son del todo iguales)
No hagas caso de aquellos que te gritan que la métrica es inútil porque ahora predomina el verso libre; la verdad es que el verso libre es la ruptura de las reglas y la única manera de romper las reglas con elegancia es CONOCIÉNDOLAS A FONDO.

Tienes que aprender Retórica, trata de no saltarte la parte de la oratoria, porque te puede ayudar a declamar tus versos con propiedad, al menos ojéala, eso si profundiza lo más que puedas en las figuras literarias.
La verdad; no es necesario que te aprendas sus nombres y taxonomías, pero si es imprescindible que las tomes una a una y te ejercites en ellas tanto como puedas, hasta internalizarlas y hacerlas parte de tu manera de hablar; recuerda que el verdadero poeta no es el que escribe poemas, sino el poema ambulante; el verdadero poeta es un poema que camina y respira y suelta tropos y figuras reiterativas y tiene ritmo en sus discursos.
Si solo quieres versificar todo lo anterior es superfluo, pero si quieres resaltar hasta lograr la excelencia, conviértete en tu poema, respira poesía, sueña con ella, vívela, y en lugar de escribir para vivir vive para escribir.
Tienes que estudiar Estética, al menos ojear los textos de esta materia, pues la poesía es belleza y sensibilidad y si no sabes qué es la belleza difícilmente podrás escribir algo bonito.
Finalmente tienes que agudizar tu capacidad de observación; es decir tus sentidos, tanto los externos –vista, oído, olfato, gusto, tacto- como los internos o propioceptivos y aún el sexto sentido.
Debes observar desde la mayor cantidad de perspectivas posibles e imaginables, hasta que consigas esa sensación de asombro que sienten los niños la primera vez que ven el mar o un ocaso o un cielo estrellado; incluso tienes que meditar el objeto del que quieres inspirarte y observarlo desde tu punto de vista, desde el punto de vista de otra persona (poniéndote en su lugar, viendo lo que ella ve, oliendo como ella huele, sintiendo lo que ella siente –o cuando menos lo que crees que ella siente-) y desde el punto de vista del objeto en cuestión. En tu mente, trasfórmate en el objeto, si vas a escribir sobre una golondrina tienes que hacerte golondrina.

Para obtener recursos para tu creatividad usa el método de anclaje, que puedes conseguir en cualquier libro de PNL y a mí personalmente me ha ayudado mucho.
Para inspirarte lee poesía, escucha música, reflexiona, medita, pasea y observa tus alrededores; recuerda que la poesía está en todas partes, en tu entorno y también dentro de tu persona; y la omnipresente poesía está en las realidades multidimensionales de este maravilloso Universo, tan sólo esperando que llegue la persona empática y sensible que la descubra y se la lleve a sus cuadernos.

Una última cosa que estaba olvidando y es de importancia crucial, gracias a Dios que existe Almuedena De La Fuente; poetisa amiga mía que me lo recordó. Cómprate una libretica de bolsillo y un bolígrafo y lleva estas dos herramientas contigo a todas partes, porque la inspiración es muy caprichosa y suele aparecer donde y cuando menos te lo esperas; y desaparece sin dejar rastros tan caprichósamente como apareció; nunca confíes en tu memoria, el olvido es una trampa caza bobos, que no avisa...anota en tu libreta la frase u oración que surgió o incluso el poema si ese fuera el caso.

Y con esto me despido, sé que no he ahondado todo lo que mereces joven trovador, pero todo lo que falta lo consigues si aprendes a buscar, en las bibliotecas, en las librerías y en la WEB

Cualquier duda que tengas, pregúntale al Santo que todo lo sabe San Google
Abrazos astronómicos y siderales desde este rinconcito Caribeño y Vesuviano de la Via Láctea

martes, 19 de octubre de 2010

La poesía es la poesía



La poesía es la poesía
es belleza y alegría
es también un sentimiento
que desborda desde adentro


La poesía es la poesía
no es tan solo fantasía
es también sensualidad
sazonada con verdad


La poesía es alma mía
es también mi día a día
es la fuente de mi canto
y ese amor que me ama tanto
tanto tanto tanto tanto
como amo su beldad


La poesía es agonía
muchas veces, noche y día
es angustia que sofoca
cuando sale de mi boca
ese verso que declamo 
con mi corazón en mano


Que si rima o si no rima
poco importa al que me lee
si consigo emocionarle
arrancándole una lágrima 
o sembrando una sonrisa
en su rostro; que invisible,
al leerme me conoce...


Y si escribo mi alma entera
y la plasmo en el papel
¿cómo espero que no quiera
algún alma entretenerse
con mis hondas inquietudes
con mis altas esperanzas
con mi utópica sentencia
de que el mundo ha de cambiar
si aprendemos cómo amar...
incondicionalmente

De Poemas y Poetas



Deja ya de ser poeta
y trasfórmate en tu poema
No me escribas un poema
mejor escríbete tú
desnúdate en el papel
entrégate 
cual Prometeo informático
a las harpías de la crítica
y a las caricias de los ángeles
Atrévete a plasmarte
íntegro, total, auténtico
ante el mundo entero
Solo entonces serás cyber-poeta

lunes, 18 de octubre de 2010

Sobre el arte de la declamación



No me gusta declamar mis poemas -ni ningún otro- en voz alta.
Porque declamar no es soplar y hacer botellas (como decía Juana...nop, no es la cubana)
Es más, el acto de declamar se parece más bien a pelar cebollas; y hacerlo con cada cebolla pegada a las fosas nasales. La declamación es un acto histriónico, en todo el sentido de la palabra. Se requiere la modulación del tono de la voz en todas sus gradaciones y en todos sus matices; uno a uno, en correspondencia con el contenido del texto.

Así que para declamar un poema correctamente; hay que leerlo varias veces en voz alta, con la mano puesta en el oído y formando una concavidad, de manera que puedas escucharte al recitar.
Tienes que escucharte; si, y no solo eso, tienes que hacerlo hasta que te sientas; no ya el lector del poema, sino el poema mismo.

¿Puedes quebrar tu voz sin que estés llorando?
¿Puedes sonreír sin que estés sonriendo?
¿Puedes tú gemir sin que estés dolido?
¿Puedes tú gritar sin que estés airado?

-¡Si puedo!-

entonces:

Tienes que sufrir aunque estés gozando.
Tienes que gozar aunque estés sufriendo.
Tienes que rabiar aunque estés sereno.
Y claro; serenarte, aunque estés rabiando.

Tienes que sentir lo que reza el verso
Tienes que fundirte con la misma estrofa
Tienes que vestirte con su linda estofa
Tienes que adentrarte en su Multiverso.

Tienen que ser uno tú y el propio verso...

Por eso, y dado que soy muy perezoso y que detesto la rutina en demasía, tanto como para no leer el mismo poema más de tres o cuatro veces; yo no declamo poemas escritos.
Si me toca declamar, lo hago sin leer, versando lo que salga en el momento de la declamación misma; y esos versos, a medida que son recitados, se los va llevando el viento... para siempre

miércoles, 13 de octubre de 2010

Los Hijos de Inmigrantes



Si Pao-la es diptongo en Italiano
y Pa -o-la es hiato en Castellano
por este hecho la métrica me irrita
y se me enreda en trampa infinita.

Si luego asumo que el fiel Napolitano
es lengua Madre de este que hoy escribe
y su romance es algo afrancesado
con ciertos toques de un árabe cruzado
con español, con griego y con eslavo
se entiende luego la confusión de mis neuronas

Y si el Inglés también lo atravesaron
en el Liceo a juro y obligado
considerando la métrica fonética
que no es silábica y enreda más la cosa
entonces hallo que el genio de Gerbasi
y de otros tantos –por hijos de inmigrantes-
es superior al genio del Homero
que sólo al Griego debíase enfrentar

Somos nosotros, los diestros poli lingues
los que sembramos con más dificultad
aquestos versos que tanto nos inquietan
y alguna vez pasticho y mazamorra
se cuelan solos en nuestro vil trovar

martes, 5 de octubre de 2010

Poesía Virtual


Golpeteo de dedos sobre el teclado;
acierto de palabras adornadas
por tropos inquietos y figuras danzantes,
los ideogramas comulgan con el ritmo
y es entre ocasos y auroras
en el trasnocho inverosímil
de noctámbulos juglares
de trovadores inspirados
de poetas impacientes
que son paridos los versos
por las llamas del crisol de los ensueños
por la lluvia del rocío de las falenas
por laboriosidad de colmenares y castores
que construyen sus estrofas entusiastas
ante el afán indetenible de expresarse
plasmando en una página virtual
nuestro maravilloso universo interior
ahora tumultuoso y turbulento
curtido de huracanes y tornados
ahora sereno y apacible
sembrado de praderas y de flores...

sábado, 2 de octubre de 2010

De poemas y poetas



El poeta es el que escribe, pero luego el poeta es también el que lee e interpreta lo que ha sido escrito.
El poema es la vida interior del poeta, por tanto el poeta es su poema exteriorizado y el poema es quién se escribe a si mismo a través de la pluma del poeta que lo escribe.

Pensamientos a dieta


A dieta están mis pensamientos
que mueren asediados por el hambre
Las ideas se escabullen como peces
y los versos me reclaman mi impaciencia
¿habrá ciencia
para éste que es mi eterno y vil lamento?
No miento, no, no...no miento
pero tampoco me delato
la vida es la vida que se exhibe en las vitrinas
la muerte es la muerte que se exhibe entre los féretros
la gracia del instinto recupera su alta pluma
reconstruye las alas del Fénix claudicante
y comienza de nuevo la odisea
de escribir y describir
la vida, el amor el desamor, la muerte
la vida tras la cortina nefasta de la muerte
el dolor abrumador que nos ahuyenta
y el placer exquisito que percibimos
embriagados de sentidos inhumanos
que se disfrazan de famélicos centinelas…